La periodontitis es una severa infección de las encías que produce daño al tejido que sostiene los dientes, ocasionando su aflojamiento y caída. Esta patología odontológica es la continuación de la gingivitis mal tratada y es probablemente la última fase antes de la pérdida de los dientes afectados. El tratamiento varía de acuerdo a la etapa en que se encuentre, y siempre deber realizado por un periodoncista.
Última actualización: 8/01/2024
Causas de la periodontitis:
Las causas de la periodontitis son diversas y suelen estar relacionadas con la presencia de placa bacteriana y la respuesta del sistema inmunológico. Estas son las principales causas:
- Acumulación de placa bacteriana: La principal causa de la periodontitis es la acumulación de placa bacteriana en los dientes y encías. La placa es una película pegajosa compuesta principalmente de bacterias que se forma constantemente en los dientes. Esto se produce cuando no nos lavamos los dientes.
- Gingivitis no tratada: La gingivitis, que es la inflamación de las encías, puede progresar a periodontitis si no se trata adecuadamente. La placa bacteriana acumulada, se transforma en sarro dental y puede avanzar hacia las capas más profundas de las encías y causar daño.
- Tabaquismo: Fumar es un factor de riesgo significativo para la periodontitis. El humo del tabaco reduce la capacidad del sistema inmunológico para combatir las infecciones y dificulta la recuperación y regeneración de las encías.
- Genética: La predisposición genética también puede influir en la susceptibilidad de una persona a desarrollar periodontitis; es decir, esto puede ser hereditario. También algunas personas pueden tener una respuesta inmunológica más débil frente a las bacterias bucales.
- Enfermedades Sistémicas: Condiciones médicas como la diabetes, enfermedades cardíacas y trastornos autoinmunes pueden aumentar el riesgo de periodontitis. Estas condiciones afectan la capacidad del cuerpo para combatir las infecciones y pueden contribuir a la inflamación crónica.
- Cambios Hormonales: Los cambios hormonales asociados con la pubertad, el embarazo y la menopausia pueden aumentar el riesgo de periodontitis en algunas personas debido a alteraciones en las encías.
- Medicamentos: Algunos medicamentos, como los antidepresivos y los medicamentos para la presión arterial, pueden afectar la salud de las encías como efecto secundario. También en algunos casos los anticonceptivos pueden predisponer la gingivitis y luego la periodontitis.
- Maloclusión: Problemas con la alineación de los dientes, como maloclusión o dientes apiñados, pueden dificultar la limpieza adecuada de los dientes, lo que favorece la acumulación de placa dura.
Casi todos los casos de periodontitis o piorrea se deben a la acumulación exacerbada de placa dental por una higiene bucal deficiente.
¿Qué es la placa dental?
La placa es una película pegajosa, suave e invisible que se genera debido a la presencia de bacterias, moco y residuos alimentares y que con el tiempo se va depositando sobre los dientes y las encías.
Si esta placa no es eliminada regularmente mediante el cepillado y el uso de hilo dental, la misma se convierte en sarro, endureciéndose por dentro de las encías, acumulando una gran cantidad de bacterias. Este proceso aumenta la producción de toxinas locales, causando GINGIVITIS.
Cuanto más tiempo permanezcan estos elementos tóxicos, mayor será la irritación e inflamación de las encías, ameritando una eliminación profesional.
La siguiente fase: Periodontitis
Si la gingivitis no se trata a tiempo, se seguirán formando SARRO, bolsas de bacterias y espacios entre las encías y los dientes. A esta condición se le denomina ya PERIODONTITIS.
¿Por qué se llama periodontitis?
Se llama así porque esta enfermedad compromete el tejido periodontal, que es el encargado de sostener, proteger y nutrir los dientes; por lo tanto, los microorganismos atacan al periodonto, debilitan la raíz, ocasionando su aflojamiento y posterior caída ?
Síntomas
Normalmente, las encías sanas poseen un color rosado y tienen un aspecto firme, estando bien sujetas a los dientes. En el caso de la periodontitis, las encías se inflaman, toman una tonalidad rojiza oscura, violácea brillante o púrpura, se vuelven retraídas, dejando ver gran parte de los dientes, y son muy dolorosas al tacto y a la masticación.
Además, estas encías producen mal aliento e hipersensibilidad al frío, sangran fácilmente, generan pus y los dientes se tornan flojos y más espaciados entre sí.
Periodontitis en Video
Tipos de periodontitis
Hay varios tipos, pero los más frecuentes son:
1️⃣ Periodontitis crónica
Es la más frecuenta, afectando gran parte de los adultos, aunque también se presenta en niños. Se produce por la acumulación de placas, presentando un deterioro lento que destruye las encías y raíces óseas de los dientes.
2️⃣ Periodontitis progresiva
Es el tipo menos común y tiene una progresión más rápida que la anterior, tendiendo a la pérdida tanto de dientes como de huesos si no es tratada a tiempo. Usualmente comienza en etapas tempranas de la vida, afectando a múltiples miembros de una misma familia.
3️⃣ Periodontitis necrotizante
Este tipo se caracteriza por un severo cuadro clínico donde la falta de riego sanguíneo (necrosis) y la infección grave generan la muerte del tejido de sostén de los dientes (encías, ligamentos y hueso). Este tipo suele presentarse en pacientes inmunocomprometidos.
Periodontitis avanzada antes y después
Diagnóstico:
Historia clínica: El diagnóstico de la periodontitis comienza realizando una historia clínica detalla, es importante por que ayuda a determinar la evolución de la enfermedad y deja constancia del cuadro sintomático actual.
Evaluación clínica: La revisión clínica y valoración profesional permite identificar la enfermedad periodontal y determinar el grado de avance y complejidad; de igual forma, permite establecer el plan de tratamiento.
Para este fin se utiliza un instrumental denominado SONDA PERIODONTAL, el cual mide la profundidad que existe entre las encías y el hueso de soporte dental. En pacientes sanos, esta profundidad no debe pasar los 3 mm. Si el paciente tiene 4 mm o más, podría ser indicio de una patología de las encías. Los espacios que superen los 6 mm, son comunes en la periodontitis.
✅ Tratamiento:
El tratamiento se divide en quirúrgico y NO quirúrgico.
Tratamiento NO quirúrgico:
El objetivo principal del tratamiento no quirúrgico es eliminar las bolsas periodontales existentes, limpiándolas y previniendo daños al sostén óseo de los dientes. Este consiste en implementar la técnica del “raspado y alisado radicular”, donde el raspado se basa en eliminar los restos tóxicos de la superficie de los dientes y por debajo de las encías, mientras que el alisado se encarga de suavizar la superficie radicular, evitando la futura acumulación de estos restos.
Tratamiento quirúrgico
Existen tratamiento regenerativos y restaurativos:
Cirugías periodontales regenerativas: Se realiza cirugía de regeneración guiada que consiste en colocar una membrana delgada que separe el hueso de soporte del diente, esto con el fin de favorecer el tejido en esta zona aislada.
También se realizan colgajos periodontales, que es una pequeña cirugía donde se exponen los dientes y el hueso de soporte mediante el desprendimiento de la encía. Esto con el fin de evaluar directamente el daño y realizar la limpieza y moldeado del hueso de soporte.
De igual manera una opción es colocar INJERTOS DE HUESO. Existen muchas técnicas y alternativas, pero su indicación y factibilidad depende de la evaluación del peridoncista.
Cirugías restaurativas: Estos tienden a restaurar el aspecto normal de los tejidos y dentro de estos procedimientos podemos citar por injertos de encías, que si bien no mejoran el soporte dental, sí mejora el aspecto estético.
Medicación
La prescripción de antibióticos tópicos u orales es necesaria para controlar la infección bacteriana presente. Además, la implementación de medidas higiénicas correctas ayudará a obtener un resultado final positivo.
El uso de enjuagues bucales medicados es necesario en estos casos, sobre todo para poder controlar la flora microbiana.